Gracias a la ciencia y los avances tecnológicos, se han vivido en las últimas décadas hechos destacados en el campo de la comunicación, inimaginables en otras épocas, cuya principal consecuencia ha sido, sin duda, la consolidación de Internet como nuevo medio de comunicación de masas. La Red ha permitido que hoy podamos ver noticias que se difunden a nivel mundial en tiempo real, transmitir información audio-visual desde nuestro lugar de trabajo (o desde casa) hasta lugares recónditos del planeta o intercambiar datos de una investigación de un país a otro.
El fácil acceso a Internet y su capacidad de llegar a un público hiper-extenso (con un coste económico bajísimo) son las razones fundamentales que han convertido a Internet en el medio de comunicación preferido de las masas. Su influencia en la sociedad actual y su, cada vez más habitual, presencia en todos los campos de la vida cotidiana han hecho de la Red la herramienta de comunicación más eficaz del momento.
Quizá por todo ello no sorprende leer en la prensa de los últimos días la petición que los diarios digitales han formulado al Gobierno: un debate electoral en la Red.
Y es que los grandes medios digitales españoles han solicitado formalmente que el actual presidente, Zapatero, y el líder de la oposición, Rajoy, celebren un debate en Internet abierto a todos los medios on line ante las elecciones del próximo 9 de marzo. La iniciativa, pionera en España, ha partido del gratuito 20 Minutos y a ella se han sumado los principales periódicos estatales, como El País, El Mundo o La Vanguardia, así como ediciones digitales de algunas televisiones y numerosos blogs.
Así es que este año los dos candidatos a la Presidencia del Gobierno mantendrán los próximos 25 de febrero y 3 de marzo sendos cara a cara que, como ocurre tradicionalmente, todos podremos contemplar sin más en la pequeña pantalla; pero además, es posible que optemos también (si finalmente la propuesta es aceptada) a participar activamente en un tercer debate realizado para la Red, en el que Zapatero y Rajoy respondan a las cuestiones planteadas por los ínter nautas (y bajo moderación de un tercero neutro acordado por ambos).
Y puede ser que finalmente sea este el modo de lograr que el encuentro entre los líderes del País no resulte ignorado por la mayoría de sus ciudadanos (pues en España hay ya cerca de 20 millones de ínter nautas y otros muchos millones de españoles residentes en el exterior que tendrían así acceso al debate de modo mucho más sencillo que por televisión).
Internet no solo ofrecería la posibilidad de llegar a una cantidad mayor de espectadores, sino que, a su vez, cambiaría la condición pasiva de todos ellos para volverlos agentes participativos del mismo debate.
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